Una experiencia auténtica
Buda enseñó que la razón por la que
sufrimos es porque no sabemos lo que realmente somos: ignoramos nuestra
verdadera naturaleza (otro nombre para la mente zen). Estamos apegados
a nuestro pensamiento. Si podemos dejar de lado nuestra idea equivocada,
entonces podemos volver a lo que ya éramos, nuestra naturaleza de
Buda. El Sexto Patriarca se iluminó cuando escuchó solo una línea del
Sutra del Diamante: "Cuando el pensamiento surja en tu mente, no te
apegues a él".
Nuestra naturaleza búdica original no es una cosa, por lo que aplicar un
término a "eso" puede aumentar el problema. Las personas
pueden apegarse fácilmente incluso al término que está diseñado para
liberarlas. Sin embargo, tenemos que hablar de “eso” si vamos a ayudar
al mundo. Buda habló mucho de este tema, de ahí vienen los sutras. Su
propósito no es la explicación. Su trabajo es señalarnos hacia lo que
realmente somos. Es por eso por lo que el Zen es conocido por su
iconoclastia. Quiere eliminar todas las ideas, incluso una buena idea
zen, para que puedas tener una experiencia auténtica.
Por el maestro zen Dae Kwang
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